SMAAART revela que un móvil nuevo genera un impacto de 60 kilos de CO2 frente a los 8 de uno reacondicionado
Durante el mes de abril se celebró el día de la Tierra y, desde SMAAART nos ofrecen algunos datos cruciales sobre los teléfonos y el impacto que tienen en el planeta.
Ahora más que nunca, somos conscientes de la importancia de cuidar nuestro planeta y el espacio en el que vivimos; buscamos estar en entornos saludables y cuidar lo que nos rodea con el fin de poder darle un futuro mejor a nuestros hijos.
Actualmente, las empresas aún siguen diseñando sus productos para que duren menos con el fin de incentivar el consumo.
Los efectos sobre el ecosistema son realmente graves
En el caso de la industria tecnológica, a causa de la obsolescencia programada o de los sistemas operativos, los efectos sobre el ecosistema son realmente graves ya que acaban con los residuos naturales y generan desechos electrónicos.
Para evitar seguir dañando nuestro ecosistema y evitar problemas futuros, SMAAART nos comparte algunos datos sobre los móviles nuevos y reacondicionados que seguramente no conocemos y que tienen un gran impacto en el medio ambiente:
Un teléfono puede tener hasta 3 vidas
UNA de teléfono nuevo más DOS de reacondicionado son las vidas que un antiguo teléfono puede tener justo después de dejar de utilizarlo.
Comúnmente, guardamos los celulares viejos en los cajones de la mesa de noche y nos olvidamos completamente de estos dispositivos.
Por esa razón, desde SMAAART, se recomienda vender o entregar los móviles antiguos para disminuir su deterioro y ayudar el planeta Tierra; reutilizar un teléfono gracias al reacondicionamiento permite ahorrar 52kg de CO2, 56kg de materia prima y salvar 1 árbol.
El 80% del CO2 emitido por un teléfono es debido a su fabricación
La compañía se centra en una economía circular en la que favorece los recorridos de corta distancia y, en consecuencia, prefiere trabajar con teléfonos procedentes de Francia y, para este 2021, también provenientes de nuestro país.
La empresa lleva un control de los móviles y realiza un proceso industrial compuesto por más de 45 puntos de control; además, hace un seguimiento de los desechos para asegurarse de que se reciclen correctamente.
Sabemos también que la fabricación de los terminales representa un 70% del impacto de la tecnología digital en el medio ambiente.
En este sentido, el hecho de optar por un móvil reacondicionado, en lugar de por uno nuevo, tiene mucho sentido medioambiental, lo que es una excelente noticia para el futuro que celebramos en el día de la Tierra.
Reutilizar piezas salva 2,8 kilos de CO2 por pieza
Uno de los pasos por los que debe pasar un móvil al ser reacondicionado y salir a al mercado nuevamente es la clasificación de los dispositivos. En SMAAART, los técnicos cualificados realizan un control de conformidad.
El objetivo de este control es comprobar que los teléfonos no figuren en la lista negra de smartphones, sean robados o falsos, estén bloqueados o se hayan utilizado en algún delito de falsificación. En esta fase, se eligen los teléfonos que pueden ser reacondicionados o que deben ser reciclados.
En caso de no pasar al siguiente paso, se intenta reutilizar las piezas de los teléfonos. En SMAAART, reutilizar piezas de los teléfonos que no pueden ser reacondicionados permite salvar 2,8 kg de CO2 por pieza reutilizada, cifra que, si se multiplica, puede tener un gran impacto en el ecosistema.
En el caso que no se pueda reacondicionar el móvil o reutilizar sus piezas, porque los teléfonos están demasiados antiguos y/o rotos, se envían al reciclaje. Reciclar un teléfono evita contaminar la Tierra y salva 90g de CO2.
56 kilos de materia prima para un teléfono de 150 gramos
Por el contrario, al reacondicionar un móvil, se están salvando esos mismos 56kg de materia prima. Actualmente la mayoría de materia prima se está agotando.
Por esta razón, no solo hacer entrega de nuestros móviles viejos, sino optar por un móvil reacondicionado es también una gran opción en el día de la Tierra.
Además, en relación con los desechos de aparatos electrónicos, es importante saber que los RAEE (residuos de aparatos eléctricos y electrónicos) contienen sustancias peligrosas como el mercurio, el plomo, el amoniaco o los gases que destruyen la capa de ozono y que afectan directamente al calentamiento global.
El Mundo Ecológico / SMAAART