La compañía Sandia National Laboratories trabaja en nuevas alternativas para generar combustible a partir de micro-algas
Recientes estudios en el campo de la biotecnología realizados por Sandia National Laboratories, una compañía situada en Nuevo México, indican que es posible utilizar cianobacterias para producir ácidos grasos libres, un precursor de los combustibles líquidos con la finalidad de conseguir combustible alternativos.
Este combustible logrado a partir de micro- algas podría ayudar a reducir la dependencia del país norteamericano respecto de la energía extranjera. Sería un tipo de combustible renovable, ya que las algas se alimentan de la luz solar y también podría reducir las emisiones de dióxido de carbono ya que utilizan la fotosíntesis. Esta nueva industria podrá crear puestos de trabajo en un sector perteneciente a la producción de energías limpias.
Barack Obama, abogó por inversiones en el desarrollo de algas de combustible, ya que podría reemplazar hasta un 17 por ciento del petróleo que utilizan Estados Unidos en materia de transporte.
Según los investigadores habrá que seguir mirando al futuro en la búsqueda de combustibles alternativos que no solo sean fósiles ya que estos recursos no son inagotables y tendrán que dirigir el trabajo de investigación apuntando hacia futuras fuentes de energía renovables.
La compañía está trabajando con cianobacterias (algas) porque son más fáciles de manipular genéticamente que las comúnmente utilizadas para la producción de biocombustible. Sin embargo, los rendimientos actuales de las cepas son demasiado bajos para la producción a gran escala.
Gran parte de nuestra comprensión fundamental de la fotosíntesis proviene de las cianobacterias, cuyo estudio se ha potenciado en la última década, con avances en la manipulación genética y la tecnología del ADN recombinante, que han sido considerados para la producción de combustible.
La compañía sigue investigando ya que considera que hay una gran cantidad de exploración que hacer entorno a este campo.