La recesión generalizada ralentiza el crecimiento de los últimos años. Las fuentes renovables suministran actualmente el 16,7% del consumo energético mundial
La inversión mundial en energías renovables se elevó un 17% el año pasado, a pesar de la recesión generalizada. Sin embargo, los expertos advirtieron que la tasa de crecimiento estaba mostrando signos de desaceleración, y podría acelerarse si las economías del mundo se toman en serio una política de de bajas emisiones de carbono.
Según el informe “Renewable Energy Policy Network for the 21st Century” (REN21) del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) el año pasado la inversión en energías renovables alcanzó los 257.000 millones de dólares.
Sin embargo, la tasa de crecimiento ha disminuido año tras año desde el 2007, y contrasta claramente con el incremento del 37% de la inversión del 2010. Los EE.UU. y China fueron los principales inversores en energías renovables del año pasado.
Según el informe, «tenemos que hacer más, si vamos a luchar contra el cambio climático y el uso de tecnologías bajas en carbono. Estas cifras son muy buenas, pero todavía hay un largo camino por recorrer «.
La energía eólica, que ha sido tradicionalmente el objetivo de la mayor parte de la inversión en renovables, fue superada por la energía solar a causa de la caída de precios de los componentes alimentado: la tecnología recibió casi el doble de dinero que la dirigida a la eólica. La inversión total en energía solar aumentó un 52%.
Los autores del informe señalan la rápida propagación de la fotovoltaica en Italia y Alemania, la rápida propagación de la pequeña fotovoltaica a otros países desde China hasta el Reino Unido, así como importantes nuevas inversiones en energía solar térmica en proyectos en España y los EE.UU.
El informe ha tomado referencias del estudio titulado “Global Trends In Renewable Energy Investment” con los datos de Bloomberg New Energy Finance.
También se desprenden datos llamativos como que las fuentes renovables suministran actualmente el 16,7% del consumo energético mundial, pero mucho de este porcentaje es la biomasa utilizada para cocinar y para calefacción en los países en desarrollo. Los autores advierten de que la participación proporcionada por la biomasa tradicional ha disminuido ligeramente, mientras que la proveniente de tecnologías de energías renovables ha aumentado.
El Mundo Ecológico