La Federación FAUNA incide en la importancia de dar a conocer cómo afectará la implantación de la nueva Ley en la sociedad y en los animales

El próximo 29 de septiembre entrará en vigor de la Ley de protección de los derechos y el bienestar de los animales publicada en el Boletín Oficial del Estado el pasado 28 de marzo

Acerca de la Ley 7/2023 se han publicado numerosas informaciones de cómo va a afectar esta ley a los animales exóticos que habitan en nuestros hogares, muchas de estas noticias son tildadas como inexactas por la Federación de Asociaciones Unidas por la Naturaleza y los Animales (FAUNA).

Por este motivo, desde, la entidad federativa que integra a las principales asociaciones de avicultura, acuariofilia, terrariofilia y cetrería de España, se quiere aclarar cuáles van a ser los reales efectos inmediatos para los animales exóticos.

Desde la federación se explica que “un animal exótico es todo aquel diferente a perro, gato, hurón o animales de abasto. Entre ellos se incluyen especies tan populares como los canarios, agapornis, los peces de acuario, cobayas o tortugas”. La suma de las especies denominadas como exóticas “sobrepasa ampliamente a la de perros y gatos en España” según explica su portavoz, Luis Olmedo.

Ley deficiente

El mismo representante de FAUNA explica que “la realidad es que la deficiente calidad técnica de la Ley deja a los animales exóticos en una posición muy compleja”, y que “lejos de protegerlos, incorpora a su redacción una vieja aspiración de las entidades animalistas conocida como listado positivo”.

Desde FAUNA se informa que “será el Gobierno quien decida qué especies serán adecuadas para ser mantenidas en cautividad en los hogares, tras la decisión de un comité científico-técnico”.

Olmedo alerta que esta decisión es una medida muy polémica que ha fracasado en países de nuestro entorno como Holanda, donde el listado fue anulado en 2017 por los tribunales al no haber seguido criterios objetivos y no discriminatorios. En la última lista propuesta para ese país, chinchillas y hámsteres rusos quedarían prohibidos, lo que ha generado una gran alarma social”.

Dos años de plazo

Pero no todo será de aplicación inmediata ya que en España la realización de los listados positivos no se hará efectiva hasta dentro dos años, ya que el Gobierno se ha dado un plazo largo para redactar el reglamento que los regule (un año más para publicar un listado de mamíferos y 30 meses para el resto, como aves, reptiles, anfibios, peces e invertebrados).

Sin embargo, explican que la disposición transitoria segunda obliga a intervenir de forma inmediata las siguientes especies:

• Artrópodos, peces y anfibios: cuya mordedura o veneno pueda suponer un riesgo grave para la integridad física o la salud de personas y animales.
• Todos los primates.
• Mamíferos silvestres que en estado adulto superen los 5 kg.
• Especies incluidas en otra normativa sectorial a nivel estatal o comunitario que impida su tenencia en cautividad.
• Reptiles venenosos y todas las especies de reptiles que en estado adulto superen los dos kilogramos de peso, excepto en el caso de quelonios.

Reptiles de más de 2 kilos

Desde FAUNA una organización sin ánimo de lucro de ciencia, naturaleza y conservación medioambiental entre particulares, aficionados y profesionales, se advierte que el caso más peliagudo y el que afecta a la mayor parte de los exóticos en los hogares el de los reptiles que alcancen más de 2 kilos en estado adulto.

Estas circunstancias hacen que numerosas especies, como las iguanas y muchas serpientes, quedarían prohibidas sin informes que lo avalen, tal como reconoció el director general Sergio García Torres a FAUNA a través del portal de transparencia.

“Es importante recalcar que esta prohibición afecta a los todos animales que cumplan ese criterio, aunque no hayan alcanzado los 2 kg de peso. Sus dueños disponen de 6 meses para dar parte de su tenencia a las autoridades, que deberán intervenirlas y ponerlas a disposición de zoológicos o centros de protección animal, el mismo destino que sufrirán los animales de especies que no sean incluidas en los listados positivos y cuya tenencia no sea autorizada expresamente” detalla el portavoz de FAUNA.

“De momento, y hasta la entrada en vigor de los correspondientes listados positivos, roedores, como conejos, cobayas, chinchillas, ratones y hámsteres, tortugas, camaleones o geckos están a salvo y se podrán seguir vendiendo en tiendas” añade Luis Olmedo.

Entrevista en Cadena SER