El tráfico ilegal de maderas tropicales representa el 80% del volumen de tráfico de especies silvestres, tanto vegetales como animales, en todo el mundo
El Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO) presentó en la COP25 un sistema para la detección temprana de maderas protegidas por el Convenio sobre Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES).
Este revolucionario sistema de identificación permite clasificar muchas especies tropicales de madera que hasta ahora no se podían reconocer in situ con las técnicas actuales. La presentación ha tenido lugar en el side event sobre “Lucha contra la deforestación a nivel mundial. Comercio de maderas tropicales”, celebrado en el Pabellón España de la Cumbre del Clima.
La detección de maderas tropicales introducidas ilegalmente es compleja por diferentes motivos. Por un lado, por la facilidad para camuflar madera ilegal de especies protegidas entre cargamentos de madera de origen legal. Y, por el otro, por la dificultad de inspección, identificación y diferenciación de las especies maderables, debido a la ausencia de una metodología sencilla y eficaz sobre el terreno o en los puntos fronterizos.
Una aplicación móvil para detectar maderas ilegales
Por su situación geográfica, España es un punto caliente en el tráfico ilegal internacional de maderas tropicales. Por este motivo, el MITECO trabaja desde hace tiempo en la búsqueda de técnicas de identificación de maderas tropicales incluidas en el Convenio CITES para poder combatir a las redes de traficantes. La aplicación de esta técnica contribuirá a aumentar la eficacia de las inspecciones realizadas por los agentes que persiguen estos delitos.
La nueva metodología ha sido desarrollada por el MITECO, en colaboración con la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Montes, Forestal y del Medio Natural, en el marco del Plan de Acción Español contra el Tráfico Ilegal y el Furtivismo Internacional de Especies Silvestres (Plan TIFIES), pionero en la Unión Europea.
En este sentido, el director general de Biodiversidad y Calidad Ambiental, Javier Cachón, ha afirmado que “España pone a disposición de todos los países esta técnica pionera para la luchar contra la tala ilegal de las selvas tropicales”.
Detección desde el móvil
Esta herramienta consiste en una guía de Alerta Temprana de Maderas, en la que están incluidos todos los tipos de madera protegidos por el convenio CITES, que va acompañada de un kit con útiles para obtener muestras de madera –que posteriormente serán remitidas a un laboratorio que corrobore la información- y dos lupas (de 24 y 400 aumentos) acoplables a la cámara del móvil y una app específica que permite observar con claridad las particularidades de cada tipo de madera, y que han sido previamente definidas en el catálogo.
Este método de actuación permite a los agentes realizar una inspección y detección del fraude sobre el terreno, dotándoles de mayor seguridad en la compleja labor de identificación de la madera, permitiendo así activar la alerta temprana y, por ejemplo, frenar un cargamento de una especie de madera cuyo examen no corresponda con la documentación aportada.
Para el correcto manejo de esta nueva metodología, en los últimos meses, el Ministerio para la Transición Ecológica junto a la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Montes, Forestal y del Medio Natural, han impartido a 56 agentes del SEPRONA cursos de anatomía macroscópica de madera.
Daños del tráfico ilegal
Según el Programa de la ONU para el Medio Ambiente y la Interpol, los crímenes forestales, entre los que se encuentra la tala ilegal, representan el primer delito medioambiental a escala global. Solo en 2016 generó entre 51.000 y 152.000 millones de dólares.
El tráfico ilegal de maderas tropicales representa el 80% del volumen de tráfico de especies silvestres en todo el mundo y favorece la degradación forestal y la deforestación, causa daños a las comunidades locales y priva a los países productores de miles de millones de euros en ingresos.
En algunas regiones tropicales como la cuenca del Amazonas, la Cuenca del Congo y el Sudeste Asiático la madera ilegal comercializada puede representar entre el 50 y el 90% del volumen total producido.
El Mundo Ecológico