En 1971 un barco salió para detener unas pruebas nucleares estadounidense, no lo consiguió, pero nació el movimiento ecologista
Hace 50 años una tripulación de doce personas no consiguió detener unas pruebas nucleares pero sí contar una historia de paz y ecología enfrentándose al poder con valentía. Ese viaje fue el origen de Greenpeace, un movimiento por la defensa de un planeta verde y en paz, que cumple este año su 50 aniversario.
La directora ejecutiva de Greenpeace Internacional, Jennifer Morgan ha declarado: “Mientras conmemoramos 50 años desde el primer viaje de Greenpeace, la pérdida de biodiversidad se acelera, la emergencia climática se agudiza y la desigualdad crece”.
A lo largo de estas cinco décadas ha habido muchas campañas y victorias para exigir un futuro verde, pacífico y justo. Greenpeace continúa trabajando como parte de un movimiento global para cambiar el sistema y garantizar que las personas y el planeta se antepongan al beneficio económico y a la contaminación”.
Las innumerables campañas y luchas de Greenpeace
Con presencia en más de 55 países, gracias a decenas de millones de personas voluntarias, socias y simpatizantes, Greenpeace ha luchado en innumerables campañas junto a sus aliados en este movimiento: bloqueando y poniendo fin a las pruebas nucleares y al vertido de desechos tóxicos en el mar; estableciendo una base en la Antártida y presionando por la protección de este continente durante 50 años.
También investigando a las grandes corporaciones contaminantes; interponiéndose entre las ballenas y los arpones balleneros; y junto a comunidades, pueblos indígenas, sindicatos y aliados de todo el mundo, luchando para asegurar un futuro justo, verde y pacífico.
Para conmemorar este pasado, la organización ha producido tres podcast sobre distintos enfoques del activismo que se pueden escuchar en las principales plataformas y en la web de Greenpeace España.
Defender la naturaleza que nos protege y nutre
Greenpeace trabaja para preservar nuestro medio ambiente natural; para reducir nuestras emisiones globales con el fin de prevenir los impactos más catastróficos del cambio climático.
Para transformar los sistemas que afectan nuestra producción de alimentos; para conseguir proteger el 30 % de los océanos para 2030; para recuperar los bosques ancestrales que son clave para la biodiversidad; y para buscar la justicia climática en nombre de las comunidades vulnerables ya afectadas por la emergencia climática en curso.
En el mismo sentido se expresa la directora de Greenpeace España, Eva Saldaña: “Ahora, más que nunca, debemos unirnos en defensa de la naturaleza que nos nutre y sostiene. Debemos defender la equidad, sobre la cual construimos una paz duradera. Necesitamos recuperar nuestro futuro compartido”.
El Mundo Ecológico / Greenpeace